La empresa había despedido a Eric en octubre del 2013 por el solo hecho de postularse a delegado, demostrando lo antisindical que es su política hacia los derechos del trabajador jerárquico.
En todo ese periodo sucedieron hechos que dilataron y dificultaron el fallo como que la empresa quiso arreglar económicamente al compañero para que desista de su reclamo, el juzgado de San Isidro suspendió sorpresivamente por casi un año el juicio por faltante de jueces y luchar con la empresa para que no amenace con despedirlos a los compañeros de Eric que querían testificar a su favor.