FECHA DE PUBLICACIÓN 31/10/15
AJB

“El estado siempre fue el empleador que más se resistió a discutir las condiciones de trabajo con los trabajadores”

Dijo Pablo Abramovich, flamante secretario general de la AJB Provincia a INFOSINDICAl  en una entrevista exclusiva en la que el gremialista habló sobre la AJB, el cambio de Gobierno, y la actualidad de los trabajadores. 


 Infosindical (i):¿Cómo fue la asunción?

  Pablo Arbamovich: (PA) “Asumimos el primero de octubre, después de haber ganado con bastante amplitud las elecciones del 26 de agosto. Para la AJB esta es una etapa nueva, porque ahora al frente de la AJB la conducción es un frente de tres agrupaciones, y hasta el momento era una sola la que la conducía”.” Además, hubo un proceso de renovación de cuadros dirigentes importante. No solo de nombre sino también generacionalmente, y para nosotros es un dato positivo tener esa capacidad de renovación. Por otro lado da cuenta de cómo es hoy la composición del Poder judicial, que el Poder Judicial  fue bajando mucho la edad de los compositores, porque desde la reforma penal para acá, desde el 98, tuvimos un incremento muy grande en la planta del Poder Judicial y eso hiso que hoy tengamos muchos compañeros y compañeras jóvenes”.

“ Nosotros asumimos con una legitimidad importante, con casi el 50% de los votos y con la convicción de que el gremio esta de en una nueva etapa, desde el punto de vista interno y  que nos hace estar bien parados para una etapa que viene compleja. Ya que todos los indicadores, todas las señales políticas, gane quien gane en las elecciones en la Provincia y a nivel nacional, indica que va haber un proceso de ajuste para la economía y sabemos que los primeros que los pagan son los trabajadores”.

 

 

  I: ¿De las 18 departamentales que tienen la AJB, cuántos conduce el nuevo frente?

 PA: “El Frente conduce 13 de las 18 departamentales. Las departamentales más grandes son las que están bajo la dirigencia del frente; La Plata (tiene un cuarto de los afiliados), San Martín, Lomas de Zamora, Bahía Blanca, Quilmes, Mercedes.  Hay cuatro departamentales que conduce la agrupación “El encuentro” y hay una sola, Necochea que es una agrupación local la que la conduce”.

 

 

 I: ¿Ayuda el desembarco de Hugo Blasco en la Federación?

 

 PA: “Sí, sin duda que ayuda. La provincia de Buenos Aires es la filial de la Federación Judicial, que siempre integro la conducción,  hasta hace poco estaba en manos de un compañero de la seccional de Mendoza, pero la AJB tenía la secretaría adjunta de la nación. Pero sin dudas que el secretario general dela Federación sea de la Provincia de Buenos Aires. Ya que nos judiciales a nivel nacional estamos tratando de tener una negociación colectiva nacional, como tienen los docentes. En nación se fija el piso y se da ayuda a las provincias que no puedan llegar con ese piso. Nos beneficia y no facilita poder luchar en todos los ámbitos. Haber ganado en La Plata, donde está la sede del poder, digamos, del Poder Judicial, para nosotros que tengamos la misma impronta nos beneficia de alguna manera”.

 I: ¿Se retrocede con un cambio de gestión, la ida de Casal los perjudica?

 

 PA: “La verdad es que nosotros no tenemos, sinceramente, demasiados avances por lo menos con el Ministerio de Justicia, que podamos extrañar en un cambio de gestión. Si, que no sé si esto tienen que ver con la voluntad del estado o con la capacidad nuestra de pelea, nosotros tenemos en los últimos años una serie de avances en materia salarial, los trabajadores del Poder Judicial fuimos consiguiendo los mejores acuerdos en las paritarias. El último acuerdo lo cerramos en un 37% sin sumas en negro, sin cuestiones que limiten ese porcentaje, teniendo en cuenta que los otros acuerdos a nivel nacional estaban entre un 28 y 30. Por lo cual nosotros llegamos a esta etapa con una recuperación del salario. Si tenemos dificultad para avanzar en las otras condiciones de trabajo, producto fundamentalmente por la voluntad de La Corte de sentarse a discutir paritarias con los trabajadores judiciales.  No nos preocupa nada el cambio de gestión, porque por lo menos desde el Ministerio de Justicia, nosotros no tuvimos una buena relación. No compartimos ni de cerca la política de Justicia y Seguridad de Casal”.

 

 I: ¿Cómo ven a los gremios oficialistas?

“Por un lado la AJB viene integrando la CTA, la CTA autónoma. La CTA vienen sosteniendo desde la fundación en el 91 la necesidad de que las organizaciones sindicales tengan autonomía política de los partidos de los gobiernos, en este sentido uno de los conflictos que produce la ruptura de la CTA.  Nosotros no somos oficialistas, y reconociendo algunas cosas del Gobierno de estos últimos 12 años, seguimos sosteniendo la autonomía política y profundizar aquello que no se hiso.  En particular los gremios que somos estatales tenemos la doble necesidad de sostener esa autonomía porque después es con ellos con los que te sentas a negociar por los derechos de los compañeros.  El problema que aparece en general en los sindicatos es que los sindicatos limitan la pelea cuando tienen los mismos signos políticos.  Lamentablemente los gremialistas “oficialistas” consiguieron los mejores resultados para sus representados, que aquellos que no estaban alineados”.

 I: ¿Por qué no les dan la ley de paritarias?

PA: “Salvo los Judiciales y APL, luego de la ley de paritaria de los municipales somos los únicos que no tememos  ley de negociación colectiva”.

 PA: “Mira, fundamentalmente porque el Estado fue el empleador que más se resistió a discutir las necesidades de los trabajadores. La Negociación Colectiva en el ámbito del Estado es donde más lento avanza. Y en particular el Poder Judicial al ser el más conservador de los tres poderes se resiste sistemáticamente a que los trabajadores judiciales tengan negociación colectiva.  Esto no es solo en la Suprema Corte, es sistemático en todos lados”.

 

 I: ¿Hay una crisis de representatividad sindical?

PA: La crisis de representatividad sindical es a nivel nacional, y tiene que ver con el modelo sindical hegemónico en la Argentina. Es un modelo sindical que no participa a los trabajadores en la toma de decisiones, un modelo que tiende a estar en el poder en 20 años, el modelo de sindicalista empresario, y que los representantes no viven la realidad de sus representados. 

Buscar: